jueves, 6 de noviembre de 2014

JUEVES DE LA TRIGÉSIMA PRIMERA SEMANA


PRIMERA LECTURA
Eso que para mí era ganancia, lo consideré pérdida comparado con Cristo

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses 3, 3-8a

Hermanos: Los circuncisos somos nosotros, que servimos a Dios desde dentro, y que ponemos nuestra gloria en Cristo Jesús, sin confiar en lo exterior.
Aunque lo que es yo, ciertamente tendría motivos para confiar en lo exterior, y si algún otro piensa que puede hacerlo, yo mucho más: circuncidado a los ocho días de nacer, israelita de nación, de la tribu de Benjamín, hebreo por los cuatro costados, y, por lo que toca a la ley, fariseo; si se trata de intransigencia, fui perseguidor de la Iglesia, si de ser justo por la ley, era irreprochable.
Sin embargo, todo eso que para mí era ganancia, lo consideré pérdida comparado con Cristo; más aún, todo lo estimo pérdida, comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor.
Por él lo perdí todo, y todo lo estimo basura con tal de ganar a Cristo.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 104. 2-3. 4-5. 6-7
V/. Que se alegren los que buscan al Señor.
R/. Que se alegren los que buscan al Señor.
Cantadle al son de instrumentos, hablad de sus maravillas; gloriaos de su nombre santo, que se alegren los que buscan al Señor.
Recurrid al Señor y a su poder, buscad continuamente su rostro.
Recordad las maravillas que hizo, sus prodigios, las sentencias de su boca.
¡Estirpe de Abrahán, su siervo, hijos de Jacob, su elegido ! El Señor es nuestro Dios, él gobierna toda la tierra.


EVANGELIO
Habrá alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta
+Lectura del santo Evangelio según San Lucas 15, 1-10

En aquel tiempo, se acercaban a Jesús los publicanos y los pecadores a escucharle.
Y los fariseos y los letrados murmuraban entre ellos:
Ese acoge a los pecadores y come con ellos.
Jesús les dijo esta parábola: Si uno de vosotros tiene cien ovejas y se le pierde una, ¿no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y cuando la encuentra, se la carga sobre los hombros, muy contento; y al llegar a casa, reúne a los amigos y a los vecinos para decirles: ¡Felicitadme!, he encontrado la oveja que se me había perdido.
Os digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta, que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse.
Y si una mujer tiene diez monedas y se le pierde una, ¿no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado, hasta que la encuentra? Y cuando la encuentra, reúne a las amigas y vecinas para decirles: ¡Felicitadme!, he encontrado la moneda que se me había perdido.
Os digo que la misma alegría habrá entre los ángeles de Dios por un solo pecador que se convierta.

Palabra del Señor.

miércoles, 5 de noviembre de 2014

MIÉRCOLES DE LA TRIGÉSIMA PRIMERA SEMANA

PRIMERA LECTURA
Seguid actuando vuestra salvación, porque es Dios quien activa en vosotros el querer y la actividad

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses 2, 12-18

Queridos hermanos: Ya que siempre habéis obedecido, no sólo cuando yo estaba presente, sino mucho más ahora en mi ausencia, seguid actuando vuestra salvación escrupulosamente, porque es Dios quien activa en vosotros el querer y la actividad para realizar su designio de amor.
Cualquier cosa que hagáis sea sin protestas ni discusiones, así seréis irreprochables y límpidos, hijos de Dios sin tacha, en medio de una gente torcida y depravada, entre la cual brilláis como lumbreras del mundo, mostrando una razón para vivir.
El día de Cristo, ése será mi argumento para probar que mis trabajos no fueran inútiles ni mis fatigas tampoco.
Y aun en el caso de que mi sangre haya de derramarse, rociando el sacrificio litúrgico que es vuestra fe, yo estoy alegre y me asocio a vuestra alegría; por vuestra parte estad alegres y asociaos a la mía.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 26, 1. 4. 13-14
V/. El Señor es mi luz y mi salvación.
R/. El Señor es mi luz y mi salvación.
V/. El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? R/.
V/. Una cosa pido al Señor, eso buscaré: habitar en la casa del Señor por los días de mi vida; gozar de la dulzura del Señor, contemplando su templo. R/.
V/. Espero gozar de la dicha del Señor en el país de la vida.
Espera en el Señor, sé valiente, ten ánimo, espera en el Señor. R/.


EVANGELIO
El que no renuncia a todos sus bienes, no puede ser discípulo mío

+Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 25-33

En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: Si alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser discípulo mío.
Quien no lleve su cruz detrás de mí, no puede ser discípulo mío.
Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla? No sea que, si echa los cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran, diciendo: «Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar» ¿O qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil? Y si no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de paz.
Lo mismo vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes, no puede ser discípulo mío.
Palabra del Señor.

martes, 4 de noviembre de 2014

MARTES DE LA TRIGÉSIMA PRIMERA SEMANA


PRIMERA LECTURA
Se rebajó, por eso Dios lo levantó

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses 2, 5-11

Hermanos: Tened entre vosotros los sentimientos propios de una vida en Cristo Jesús.
El, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios; al contrario, se despojó de su rango y tomó la condición de esclavo, pasando por uno de tantos.
Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebajó hasta someterse incluso a la muerte, y una muerte de cruz.
Por eso Dios lo levantó sobre todo y le concedió el «Nombre sobre todo nombre» ; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el Cielo, en la Tierra, en el Abismo, y toda lengua proclame: « ¡Jesucristo es Señor! », para gloria de Dios Padre.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 21, 26b-27. 28-30a. 31-32

V/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea.
R/. El Señor es mi alabanza en la gran asamblea.
V/. Cumpliré mis votos delante de tus fieles.
Los desvalidos comerán hasta saciarse, alabarán al Señor los que le buscan: viva su corazón por siempre. R/.
V/. Lo recordarán y volverán al Señor hasta de los confines del orbe; en su presencia se postrarán las familias de los pueblos.
Porque del Señor es el reino, él gobierna a los pueblos; ante él se postrarán las cenizas de la tumba. R/.
V/. Me hará vivir para él, mi descendencia le servirá; hablarán del Señor a la generación futura, contarán su justicia al pueblo que ha de nacer: todo lo que hizo el Señor. R/.


EVANGELIO
Sal por los caminos y senderos, e insísteles hasta que entren y se me llene la casa

+Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 15-24

En aquel tiempo, uno de los comensales dijo a Jesús: ¡Dichoso el que coma en el banquete del reino de Dios! Jesús le contestó: Un hombre daba un gran banquete y convidó a mucha gente; a la hora del banquete mandó un criado a avisar a los convidados: Venid, que ya está preparado.
Pero ellos se excusaron uno tras otro.
El primero le dijo: He comprado un campo y tengo que ir a verlo. Dispénsame, por favor.
Otro dijo: He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Dispénsame, por favor.
Otro dijo: Me acabo de casar y, naturalmente, no puedo ir.
El criado volvió a contárselo al amo.
Entonces el dueño de casa, indignado, le dijo al criado: Sal corriendo a las plazas y calles de la ciudad y tráete a los pobres, a los lisiados, a los ciegos y a los cojos.
El criado dijo: Señor, se ha hecho lo que mandaste y todavía queda sitio.
Entonces el amo dijo: Sal por los caminos y senderos, e insísteles hasta que entren y se me llene la casa. Y os digo que ninguno de aquellos convidados probará mi banquete.
Palabra del Señor.

lunes, 3 de noviembre de 2014

FRAY ESCOBA, pelicula sobre San Martin de Porres

LUNES DE LA TRIGÉSIMA PRIMERA SEMANA

PRIMERA LECTURA
Dadme esta gran alegría: Manteneos unánimes

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses 2, 1-4

Hermanos: Si queréis darme el consuelo de Cristo y aliviarme con vuestro amor, si nos une el mismo Espíritu y tenéis entrañas compasivas, dadme esta gran alegría: Manteneos unánimes y concordes, con un mismo amor y un mismo sentir.
No obréis por envidia ni por ostentación, dejaos guiar por la humildad y considerad siempre superiores a los demás.
No os encerréis en vuestros intereses, sino buscad todos el interés de los demás.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 130, 1. 2. 3

V/. Guarda mi alma en la paz, junto a ti, Señor.
R/. Guarda mi alma en la paz, junto a ti, Señor.
V/. Señor, mi corazón no es ambicioso.
ni mis ojos altaneros; no pretendo grandezas que superan mi capacidad. R/.
V/. Yo acallo y modero mis deseos, como un niño en brazos de su madre. R/.
V/. Espera Israel en el Señor ahora y por siempre. R/.

 

EVANGELIO
No invites a tus amigos, sino a pobres y lisiados

+Lectura del santo Evangelio según San Lucas 14, 12-14

En aquel tiempo, decía Jesús a uno de los principales fariseos que le había invitado: Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos ni a tus hermanos ni a tus parientes ni a los vecinos ricos: porque corresponderán invitándote y quedarás pagado.
Cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; dichoso tú, porque no pueden pagarte; te pagarán cuando resuciten los justos.

Palabra del Señor.

jueves, 30 de octubre de 2014

JUEVES DE LA TRIGÉSIMA SEMANA

PRIMERA LECTURA
Tomad las armas de Dios para poder mantener las posiciones

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Efesios 6, 10-20

Hermanos: Buscad vuestra fuerza en el Señor y en su invencible poder.
Poneos las armas que Dios os da, para poder resistir a las estratagemas del diablo, porque nuestra lucha no es contra hombres de carne y hueso sino contra los soberanos, autoridades y poderes que dominan este mundo de tinieblas, contra las fuerzas sobrehumanas y supremas del mal.
Por eso, tomad las armas de Dios para poder resistir en el día fatal y, después de actuar a fondo, mantener las posiciones.
Estad firmes, repito: abrochaos el cinturón de la verdad, por coraza poneos la justicia; bien calzados para estar dispuestos a anunciar la noticia de la paz. Y, por supuesto, tened embrazado el escudo de la fe, donde se apagarán las flechas incendiarias del malo.
Tomad por casco la salvación y por espada la del Espíritu,
toda palabra de Dios, insistiendo y pidiendo en la oración.
Orad en toda ocasión con la ayuda del Espíritu.
Tened vigilias en que oréis con constancia por todo el pueblo santo.
Pedid también por mí, para que Dios abra mi boca y me conceda palabras que anuncien sin temor el secreto designio contenido en el Evangelio, del que soy embajador en cadenas.
Pedid que tenga valor para hablar de él como debo.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 143, 1. 2. 9-10
V/. Bendito el Señor, mi Roca.
R/. Bendito el Señor, mi Roca.
V/. Bendito el Señor, mi Roca, que adiestra mis manos para el combate, mis dedos para la pelea. R/.
V/. Mi bienhechor, mi alcázar, baluarte donde me pongo a salvo; mi escudo y mi refugio, que me somete los pueblos. R/.
V/. Dios mío, te cantaré un cántico nuevo, tocaré para ti el arpa de diez cuerdas: para ti que das la victoria a los reyes y salvas a David tu siervo. R/.


EVANGELIO
No cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén

+Lectura del santo Evangelio según San Lucas 13, 31-35

En aquella ocasión, se acercaron unos fariseos a decirle: Márchate de aquí, porque Herodes quiere matarte.
El contestó: Id a decirle a ese zorro: «Hoy y mañana seguiré curando y echando demonios; pasado mañana llego a mi término».
Pero hoy y mañana y pasado tengo que caminar, porque no cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén.
¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían! Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como la gallina reúne a sus pollitos bajo las alas ! Pero no habéis querido.
Vuestra casa se os quedará vacía.
Os digo que no me volveréis a ver hasta el día que exclaméis: «Bendito el que viene en nombre del Señor.

Palabra del Señor.

miércoles, 29 de octubre de 2014

MIÉRCOLES DE LA TRIGÉSIMA SEMANA


PRIMERA LECTURA
No como quien sirve a los hombres, sino como esclavos de Cristo

Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Efesios 6, 1-9

Hijos, obedeced a vuestros padres como el Señor quiere, porque eso es justo.
«Honra a tu padre y a tu madre » es el primer mandamiento al que se añade una promesa: «Te irá bien y vivirás largo tiempo en la tierra».
Padres, vosotros no exasperéis a vuestros hijos; criadlos educándolos y corrigiéndolos como haría el Señor.
Esclavos, obedeced a vuestros amos de la tierra con profundo respeto, de todo corazón, como a Cristo.
No por las apariencias, para quedar bien, sino como esclavos de Cristo que hacen lo que Dios quiere; con toda el alma, de buena gana, como quien sirve al Señor y no a hombres.
Sabed que lo que uno haga de bueno, sea esclavo o libre, se lo pagará el Señor.
Amos, correspondedles dejándoos de amenazas; sabéis que ellos y vosotros tenéis un amo en el cielo y que ése no es parcial con nadie.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 144, 10-11. 12-13ab. 13cd-14

V/. El Señor es fiel a sus palabras.
R/. El Señor es fiel a sus palabras.
V/. Que todas tus criaturas te den gracias, Señor, que te bendigan tus fieles; que proclamen la gloria de tu reinado, que hablen de tus hazañas. R/.
V/. Que expliquen tus hazañas a los hombres, la gloria y majestad de tu reinado.
Tu reinado es un reinado perpetuo, tu gobierno va de edad en edad. R/.
V/. El Señor es fiel a sus palabras, bondadoso en todas sus acciones.
El Señor sostiene a los que van a caer, endereza a los que ya se doblan. R/.


EVANGELIO
Vendrán de Oriente y Occidente y se sentarán a la mesa en el Reino de Dios

+Lectura del santo Evangelio según San Lucas 13, 22-30

En aquel tiempo, Jesús, de camino hacia Jerusalén, recorría ciudades y aldeas enseñando.
Uno le preguntó: Señor, ¿serán pocos los que se salven? Jesús les dijo: Esforzaos en entrar por la puerta estrecha.
Os digo que muchos intentarán entrar y no podrán.
Cuando el amo de la casa se levante y cierre la puerta, os quedaréis fuera y llamaréis a la puerta diciendo.
«Señor, ábrenos» y él os replicará: «No sé quiénes sois».
Entonces comenzaréis a decir: «Hemos comido y bebido contigo y tú has enseñado en nuestras plazas».
Pero él os replicará: «No sé quiénes sois. Alejaos de mí, malvados».
Entonces será el llanto y el rechinar de dientes, cuando veáis a Abrahán, Isaac y Jacob y a todos los profetas en el Reino de Dios y vosotros os veáis echados fuera.
Y vendrán de Oriente y Occidente, del Norte y del Sur y se sentarán a la mesa en el Reino de Dios.
Mirad: hay últimos que serán primeros y primeros que serán últimos.

Palabra del Señor.