miércoles, 28 de diciembre de 2011

LOS SANTOS INOCENTES







28 de diciembre
LOS SANTOS INOCENTES,(*)
Mártires

Herodes mandó matar a todos los niños que había
en Belén y en toda su comarca, de dos años abajo.
(Mateo,2, 16).





Había Jesús nacido en Belén, y los magos vinieron de Oriente a la corte de Herodes para averiguar dónde acababa de nacer "el rey de los judíos". Turbóse Herodes, y, habiendo convocado a los príncipes de los sacerdotes, les preguntó donde debía nacer el Cristo. Llamó después a los magos en secreto y les dijo: "Id, informaos con cuidado acerca de este niño, y cuando lo hayáis encontrado, hacédmelo saber, para que yo también vaya a adorarlo". Pero los magos, advertidos por el Cielo, no volvieron. Se enfureció Herodes e hizo degollar a todos los niños de Belén y sus alrededores, hasta la edad de dos años. Este bautismo de sangre envió muchos ángeles al cielo.

MEDITACIÓN
SOBRE LA FIESTA
DE LOS SANTOS INOCENTES
I. Estos niños vertieron su sangre por Jesucristo antes de conocerlo. Hace ya tantos años que tú conoces a Dios y los beneficios con que te ha colmado, y ¿cómo lo has servido? Dale la flor de tu vida, conságrale a su servicio tus mejores años, como los santos inocentes. ¡Dichosos niños, no pueden aún pronunciar el nombre de Cristo, y ya merecen morir por Él! (San Eusebio).
II. No es hablando, sino sufriendo y muriendo, como estas primicias de los mártires, estas flores de la naciente Iglesia confesaron la fe de Jesucristo. A menudo Dios pide que tú lo confieses callándote y sufriendo. Te calumnian, te persiguen: sufre, cállate. ¡Ah! ¡cuán elocuente testimonio de tu fidelidad es esta paciencia muda! En vano dices que eres totalmente de Dios: corresponde que lo digan tus acciones; trabaja por Dios, sufre por amor suyo.
III. Debes ser inocente como estos niños si quieres entrar en el cielo: Si perdiste la inocencia bautismal, es preciso que laves tu alma en las amargas aguas de la penitencia. Ojos míos, derramad vuestras lágrimas para extinguir el fuego del infierno y aun del purgatorio, y para lavar mis pecados; porque nada que esté sucio entrará en el reino de los cielos. ¡Dichoso si a semejanza de estas santas almas, podemos obtener la corona del martirio! Esta edad, todavía no apta para la lucha, está ya madura para la victoria.

La pureza
Orad por los niños de China.


ORACIÓN
Oh Dios, cuyos Inocentes mártires publican hoy la gloria no con sus palabras sino con su sangre, haced morir en nosotros los vicios todos, a fin de que la santidad de nuestra vida venidera proclame la fe que confiesan nuestros labios. Por J. C. N. S. Amén.


Santoral de Juan Esteban Grosez, S.J. Tomo IV, (Ed. ICTION, BuenosAires, 1982)

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LOS SANTOS INOCENTES, Mártires



Santos Inocentes, mártires

Fiesta


PRIMERA LECTURA


La sangre de Cristo nos purifica de todo pecado


Lectura de la primera carta del apóstol san Juan    1, 5-10; 2, 1-2


Queridos hermanos: Este es el mensaje que le hemos oído a Jesucristo y les anunciamos: Dios es luz y no hay en él oscuridad alguna. Si decimos que estamos en comunión con él, y andamos en oscuridad, mentimos y no practicamos la verdad. Pero si caminamos en la luz como él, que está en la luz, estamos en comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesús nos purifica de todo pecado.

Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no habita en nosotros. Si reconocemos nuestros pecados, Dios, que es justo y fiel, perdonará nuestros pecados y nos purificará de toda maldad.

Si decimos que no hemos pecado, hacemos pasar a Dios por mentiroso, y su palabra no habita en nosotros.

Hijos míos, les escribo estas cosas para que no pequen. Pero si alguno peca, tenemos ante el Padre un abogado, Jesucristo, el Justo. El se ha entregado como víctima por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino por los del mundo entero.

Palabra de Dios.



Salmo Responsorial  Sal 123, 2-3.4-5.7b-8


R. Hemos salvado la vida, como un pájaro de la trampa del cazador.

Si el Señor no hubiera estado a nuestro favor
cuando nos atacaron los hombres,
nos habrían devorado vivos
en el volcán de su ira. R.

 Nos habrían tragado las aguas,
un torrente habría pasado sobre nosotros;
habrían pasado sobre nosotros
las aguas turbulentas. R.

 La red se rompió y pudimos escapar.
Nuestro auxilio es el Señor, que hizo el cielo y la tierra.
Hemos salvado la vida,
como un pájaro de la trampa del cazador. R.



Aclamación antes del Evangelio

Aleluya, aleluya. Señor, Dios eterno, alegres te cantamos, a ti nuestra alabanza. A ti, Señor, te aclama la brillante multitud de los mártires. Aleluya.



EVANGELIO


Herodes mandó matar a todos los niños en Belén


+ Lectura del santo Evangelio según san Mateo 2, 13-18


Después que los Magos se fueron, el ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo:

«Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y quédate allí hasta que yo te avise; porque Herodes va a buscar al niño para matarlo».

José se levantó de noche, tomó al niño y a su madre, y partió hacia Egipto, donde permaneció hasta la muerte de Herodes. Así se cumplió lo que había anunciado el Señor por el profeta: De Egipto llamé a mi hijo.

Entonces Herodes, viéndose burlado por los Magos, se enfureció tanto que mandó matar a todos los niños de Belén y de todos sus alrededores que tuvieran menos de dos años, conforme a la información que había recibido de los Magos. Así se cumplió lo anunciado por el profeta Jeremías:

Se ha escuchado en Ramá un clamor, un gran llanto y lamento: es Raquel que llora por sus hijos, y no quiere consolarse, porque ya no existen.

Palabra del Señor.