martes, 4 de junio de 2024

SAN FRANCISCO CARACCIOLO, Confesor



4 de Junio
SAN FRANCISCO CARACCIOLO,
 
Confesor


  Llega la hora y ya ha venido, en que los verdaderos
adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad,
porque tales son los adoradores que busca el Padre.
(Juan, 4, 23)

   Francisco Caracciolo, fundador de la Orden de los Clérigos Regulares Menores, distinguióse desde su infancia por una ardiente piedad y una especial devoción por el Santísimo Sacramento. Pasaba noches enteras en adoración ante el santo Tabernáculo. Puso todo su empeño en aumentar en las almas esta devoción que le era tan querida, y estableció en su Orden la adoración perpetua. Advertido de su muerte próxima en una peregrinación que hizo a Loreto, fuese a una casa de su Orden, en Agnone, dijo al entrar: "Éste es el lugar de mi descanso". Tuvo, casi en seguida, una violenta fiebre y se hizo llevar el santo Viático, que recibió de rodillas con los sentimientos de la más viva piedad, y expiró el 4 de junio de 1608, a la edad de 44 años.

MEDITACIÓN SOBRE LA ORACIÓN MENTAL  

   I. Dios es espíritu; por esto quiere ser adorado en espíritu. No es suficiente hablarle sólo con los labios: es menester que tu corazón esté de acuerdo con tu boca. Acostúmbrate a rezarle con atención; ten siempre a Dios en tu espíritu, y te dará vergüenza hablarle con menos atención y respeto que a un hombre. No es a la boca, sino al corazón a quien Dios oye y considera. (Tertuliano).

   II. Retírate aparte y cada mañana, haz un poco de oración mental. Medita alguna verdad importante: piensa en la muerte, en el infierno, en el juicio, en el paraíso, en la Pasión de Jesucristo. Si estuviera tu espíritu hondamente penetrado de estas verdades, tu voluntad se inclinaría espontáneamente a hacer todo, a sufrir todo por Jesucristo. De este modo todos los santos platicaron con Dios. Comienza; no se precisa ni tanto espíritu, ni tantos esfuerzos como tú crees. Gusta Dios que se le hable sencillamente y con confianza. 

   III. De tiempo en tiempo, medita sobre aquello que ves; es una especie de oración sumamente útil y muy fácil. ¿Qué hacemos en este mundo? ¿Qué llegaré a ser? ¿Dentro de cien años dónde estaré? ¿Qué fue de los años de mi juventud? ¿Qué quisiera haber hecho para el cielo en la hora de mi muerte? ¿De qué me valdrán entonces los placeres, las riquezas, la estima de los hombres? ¿Dónde están ahora los partidarios del mundo que aún estaban con nosotros hace poco tiempo? (San Bernardo).

El conocimiento de uno mismo
Orad por
 el acrecentamiento
 de la devoción al Santísimo Sacramento.

ORACIÓN
   Oh Dios, que habéis adornado con el celo de la oración y el amor de la penitencia al bienaventurado Francisco, fundador de una nueva Orden religiosa, concedednos la gracia de aprovechar sus ejemplos, a fin de que, orando sin cesar y reduciendo nuestra carne a servidumbre, merezcamos alcanzar la gloria celestial.

MARTES DE LA NOVENA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO


PRIMERA LECTURA
Esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva

Lectura de la segunda carta del Apóstol San Pedro 3, 12-15a. 17-18

Queridos hermanos: Esperad y apresurad la venida del Señor, cuando desaparecerán los cielos consumidos por el fuego y se derretirán los elementos.
Pero nosotros, confiados en la promesa del Señor, esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva, en que habite la justicia.
Por tanto, queridos hermanos, mientras esperáis estos acontecimientos, procurad que Dios os encuentre en paz con él, inmaculados e irreprochables.
Considerad que la paciencia de nuestro Señor es nuestra salvación.
Así, pues, vosotros, queridos hermanos, estáis prevenidos; tened cuidado de que no os arrastre el error de esos hombres sin principios y perdáis pie.
Creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, a quien sea la gloria ahora y hasta el día eterno.
Amén.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 89, 2. 3-4. 10. 14 y 16
V/. Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación.
R/. Señor, tú has sido nuestro refugio de generación en generación.


V/. Antes que naciesen los montes, o fuera engendrado el orbe de la tierra, desde siempre y por siempre tú eres Dios. R/.


V/. Tú reduces el hombre a polvo, diciendo: Retornad, hijos de Adán.
Mil años en tu presencia son un ayer que pasó, una vela nocturna. R/.


V/. Aunque uno viva setenta años, y el más robusto hasta ochenta, la mayor parte son fatiga inútil, porque pasan aprisa y vuelan. R/.


V/. Por la mañana sácianos de tu misericordia, y toda nuestra vida será alegría y júbilo; que tus siervos vean tu acción y sus hijos, tu gloria. R/.




EVANGELIO
Lo que es del César pagádselo al César, y lo que es de Dios, a Dios

+Lectura del santo Evangelio según San Marcos 12, 13-17

En aquel tiempo, mandaron a Jesús unos fariseos y partidarios de Herodes, para cazarlo con una pregunta.
Se acercaron y le dijeron: Maestro, sabemos que eres sincero y que no te importa de nadie; porque no te fijas en apariencias, sino que enseñas el camino de Dios sinceramente.
¿Es lícito pagar impuesto al César o no? ¿Pagamos o no pagamos? Jesús, viendo su hipocresía, les replicó: ¿Por qué intentáis cogerme ? Traedme un denario, que lo vea.
Se lo trajeron.
Y él les preguntó: ¿De quién es esta cara y esta inscripción? Le contestaron: Del César.
Les replicó: Lo que es del César pagádselo al César, y lo que es de Dios a Dios.
Se quedaron admirados.

Palabra del Señor.