domingo, 12 de mayo de 2024

NUESTRA SEÑORA DE LOS DESAMPARADOS, Patrona de Valencia, España




Segundo domingo de mayo
NUESTRA SEÑORA
DE LOS DESAMPARADOS,
Patrona de Valencia, España



Consideramos a María nuestra Madre porque somos desamparados y tenemos necesidad de su amparo, y porque para eso nos la dio Jesús desde la cruz: "Mujer, ahí tienes a tu hijo...- "Ahí tienes a tu Madre". Dios "nos la propone como modelo de fidelidad a su Palabra y nos la ofrece como amparo en nuestro desvalimiento y estímulo constante para nuestra caridad"

   La ciudad del Turia, que tan pródigamente ha sido regalada por la mano de la naturaleza, cuenta entre sus más preciadas joyas la imagen veneranda de su Patrona la Virgen de los Inocentes Mártires y Desamparados, objeto de su más tierno y fervoroso culto.
   El origen de esta sagrada imagen va unido a una de las glorias valencianas, como es la fundación de su antiguo hospital, el primero en el mundo, destinado a pobres dementes y desamparados. Conmovido profundamente el Rvdo. Padre Jofré, de la Orden mercedaria, ante el triste espectáculo de unos niños que maltrataban a un loco, de tal suerte intentó remediarlo, que encendidos unos piadosos pechos pusieron en práctica el pensamiento del comendador de esta Orden y se constituyó, al momento, una Cofradía para sufragar los gastos del hospital, previas las oportunas amortizaciones que concedió el Rey D. Martín, por Decreto dado en Barcelona a 30 de noviembre de 1409 y la Bula memorable en que fueron aprobadas las Constituciones por el Papa Gregorio XII y el Rey D. Fernando de Aragón, en agosto de 1414.
   Organizada la Real Cofradía con fines religiosos y benéficos, pronto apareció la devota imagen que encarnaba la caritativa idea de los fundadores, y que según tradición, no exenta de pruebas, fue labrada por mano de unos peregrinos, merced al poder intercesor del Venerable Jofré. El historiador Escolano la llama "devotísima imagen de la Virgen, cuya peregrina hermosura y extraordinarios hechos traen aficionadísimos a todos", jamás pudieron copiarla con perfección los Ribaltas, Orrente, Zariñena y Espinosa, quienes reconocieron en Ella "alguna cosa sobrenatural".