jueves, 11 de octubre de 2012

LA MADRE DE DIOS DE BEGOÑA, Patrona de Bilbao


11 de octubre
LA MADRE DE DIOS DE BEGOÑA,

Patrona de Bilbao

   Como una prueba de pescadores, marinos y mercaderes nació Bilbao, en días remotos que la historia no los revela, entre montañas, allá donde su ría no admite ya el remontar de los navíos y los caminos de tierra, rutas de traficantes y arrieros, comienzan a adentrarse trabajosamente hacia tierras de Castilla. Fue el año 1300, cuando don Diego López de Haro, quinto señor de Vizcaya, que tal nombre ostentara, le otorgó, "en el nombre de Dios e de la Virgen bienaventurada Santa María", y "con placer de todos los vizcaínos", el título de villa. Mas don Diego no fundó a Bilbao. La puebla existía ya y su caserío se apretaba -¿desde cuándo?- a orillas del Nervión, en las tierras de Begoña que se asomaban a la ría. Bilbao había nacido en Begoña. Ahora se emancipaba y en la carta puebla, en el acta de emancipación, ya que no de nacimiento, dos nombres hacen para nosotros su primera aparición, juntos entran en la historia y hermanados continuarán a través de los siglos: Santa María de Begoña y Bilbao.

JUEVES DE LA VIGÉSIMA SÉPTIMA SEMANA




PRIMERA LECTURA
¿Recibisteis el Espíritu por observar la ley, o por haber respondido a la fe?
Lectura de la carta del Apóstol San Pablo a los Gálatas 3, 1-5
¡Insensatos gálatas!
¿Quién os ha embrujado?
¡Y pensar que ante vuestros ojos presentaron la figura de Jesucristo en la cruz!
Contestadme a una sola pregunta:
¿Recibisteis el Espíritu por observar la ley, o por haber respondido a la fe?
¿Tan estúpidos sois?
¡Empezasteis por el espíritu para terminar con la materia!
¡Tantas magníficas experiencias en vano!
Si es que han sido en vano.
Vamos a ver:
Cuando Dios os concede el Espíritu y obra prodigios entre vosotros, ¿por qué lo hace? ¿Porque observáis la ley, o porque respondéis a la fe?
Palabra de Dios.

Salmo responsorial Lc 1. 69-70, 71-72. 73-75
R.  Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
      porque ha visitado a su pueblo.
Nos ha suscitado una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo;
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos profetas. R.
Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
realizando la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza. R.
El juramento que juró a nuestro padre Abrahán,
para concedernos que, libres de temor,
arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días. R.

EVANGELIO
Pedid y se os dará
+ Lectura del santo Evangelio según San Lucas 11, 5-13
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
–Si alguno de vosotros tiene un amigo y viene a medianoche para decirle: «Amigo, préstame tres panes, pues uno de mis amigos ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle».
Y, desde dentro, el otro le responde: «No me molestes; la puerta está cerrada; mis niños y yo estamos acostados: no puedo levantarme para dártelos».
Si el otro insiste llamando, yo os digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, al menos por la importunidad se levantará y le dará cuanto necesite.
Pues así os digo a vosotros:
Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide, recibe, quien busca, halla, y al que llama, se le abre.
¿Qué padre entre vosotros, cuando el hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿O si le pide un pez, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión?
Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo piden?.
Palabra del Señor.