PRIMERA
LECTURA
Contaron a la
Iglesia lo que Dios había hecho por medio de ellos
Lectura de los Hechos
de los Apóstoles 14, 20b-26
En
aquellos días, volvieron Pablo y Bernabé a Listra, a Iconio y a Antioquía,
animando a los discípulos y exhortándolos a perseverar en la fe diciéndoles que
hay que pasar mucho para entrar en el Reino de Dios.
En
cada iglesia designaban presbíteros, oraban, ayudaban y los encomendaban al
Señor en quien habían creído. Atravesaron Pisidia y llegaron a Panfilia.
Predicaron en Perge, bajaron a Atalía y allí se embarcaron para Antioquía, de
donde los habían enviado, con la gracia de Dios, a la misión que acababan de
cumplir. Al llegar, reunieron a la comunidad, les contaron lo que Dios había
hecho por medio de ellos y cómo había abierto a los gentiles la puerta de la
fe.
Palabra
de Dios.
Salmo
responsorial Sal 144, 8-9. 10-11. 12-13ab
R.
Bendeciré tu nombre por siempre jamás,
Dios mío, mi Rey.
O
bien:
Aleluya.
El
Señor es clemente y misericordioso,
lento
a la cólera y rico en piedad;
el
Señor es bueno con todos,
es
cariñoso con todas sus criaturas. R.
Que
todas tus criaturas te den gracias, Señor,
que
te bendigan tus fieles;
que
proclamen la gloria de tu reinado,
que
hablen de tus hazañas. R.
Explicando
tus hazañas a los hombres,
la
gloria y majestad de tu reinado.
Tu
reinado es un reinado perpetuo,
tu
gobierno va de edad en edad. R.
SEGUNDA
LECTURA
Dios enjugará
las lágrimas de sus ojos
Lectura del libro del
Apocalipsis 21, 1-5a
Yo,
Juan, vi un cielo nuevo y una tierra nueva,
porque
el primer cielo y la primera tierra han pasado,
y
el mar ya no existe.
Vi
la ciudad santa, la nueva Jerusalén,
que
descendía del cielo, enviada por Dios,
arreglada
como una novia que se adorna para su esposo.
Y
escuché una voz potente que decía desde el trono:
–Esta
es la morada de Dios con los hombres:
acampará
entre ellos.
Ellos
serán su pueblo
y
Dios estará con ellos.
Enjugará
las lágrimas de sus ojos.
Ya
no habrá muerte, ni luto,
ni
llanto, ni dolor.
Porque
el primer mundo ha pasado.
Y
el que estaba sentado en el trono dijo:
«Ahora
hago el universo nuevo.»
Palabra
de Dios.
Aleluya Jn 13, 34
Aleluya,
aleluya.
Os
doy un mandamiento nuevo, que os améis unos a otros como yo os he amado, dice
el Señor.
EVANGELIO
Os doy un
mandamiento nuevo: que os améis unos a otros
+ Lectura del santo
Evangelio según San Juan 13, 31-33a. 34-35
Cuando
salió judas del cenáculo, dijo Jesús:
–Ahora
es glorificado el Hijo del Hombre y Dios es glorificado en él. (Si Dios es
glorificado en él, también Dios lo glorificará en sí mismo: pronto lo
glorificará).
Hijos
míos, me queda poco de estar con vosotros.
Os
doy un mandamiento nuevo: que os améis unos a otros como yo os he amado. La
señal por la que conocerán que sois discípulos míos, será que os amáis unos a
otros.
Palabra
del Señor.