11 de Abril
SAN ESTANISLAO,
Obispo y mártir
SAN ESTANISLAO,
Obispo y mártir
Va a venir tiempo en que quien os matare
se persuada
hacer un obsequio a Dios.
(Juan, 16, 2).
(Juan, 16, 2).
San Estanislao, obispo de Cracovia,
reprendió valientemente al rey Boleslao por su mala vida. Este príncipe, para
vengarse, sobornó a dos falsos testigos y los hizo declarar que el santo poseía
un terreno que no le pertenecía. San Estanislao resucitó a quien se lo había
vendido, y con este testimonio irrecusable confundió a sus acusadores. Este
milagro no convirtió a Boleslao; irritado éste porque el santo lo había
excomulgado, le dio muerte con sus propias manos en momentos en que celebraba
el Santo Sacrificio de la misa. Sucedió en 1079.
I. Ese hombre a quien San Estanislao
resucitara, prefirió morir nuevamente volviendo al purgatorio antes que vivir
entre tantas ocasiones de condenarse. Y, en verdad, tenía razón, pues hay
peligro de condenarse en todas las edades y en todas las condiciones. ¿Cuál es
tu edad, cuál es tu condición? ¿En qué estado de vida te alistaste? Ten cuidado
con los peligros que te amenazan. Si aún estás libre de todo compromiso, elige
el género de vida más seguro y más libre de las ocasiones de ofender a Dios.
II. No hay sitio en este mundo donde no
se pueda ofender a Dios. Adán pecó en el paraíso terrenal, y los ángeles
pecaron en el cielo. Se ofende a Dios en los poblados, en la soledad, en las
cabañas de los pastores, en los palacios de los magnates, en las iglesias y en
las casas consagradas a Dios. En todas partes encuéntrase al demonio, en todas
partes se llevan sus cadenas. Y nos holgamos en este camino en el que estamos
siempre expuestos a caer en el precipicio; en este mar, en el que somos
incesantemente azotados por la tempestad, sin saber a qué puerto arribaremos,
ni en qué escollo naufragaremos.
III. Para estar seguro entre tantos
peligros, apártate de la multitud, gusta de la soledad: es el ambiente de la
virtud. Si no puedes llegar a tanto, frecuenta a los hombres lo menos posible,
y acuérdate que Dios está en todas partes. Si quieres cometer pecados busca un
lugar en donde no te pueda ver Dios, y haz entonces lo que quieras. (San Agustín).
La huida del pecado
Orad por las
almas del purgatorio.
Orad por las
almas del purgatorio.
ORACIÓN
Oh Dios, en cuyo honor sucumbió el
glorioso obispo Estanislao bajo la espada de un impío, haced, os lo suplicamos,
que todos los que imploren su socorro consigan el saludable efecto de su
pedido. Por J. C. N. S. Amén.