Estas lecturas se emplean en la misa vespertina del día 24
de diciembre, ya sea antes o después de las primeras Vísperas de Navidad.
PRIMERA LECTURA
El Señor te prefiere a ti
Lectura del libro de Isaías 62, 1-5
Por
amor de Sión no callaré,
por
amor de Jerusalén no descansaré,
hasta
que rompa la aurora de su justicia,
y
su salvación llamee como antorcha.
Los
pueblos verán tu justicia,
y
los reyes tu gloria;
te
pondrán un nombre nuevo,
pronunciado
por la boca del Señor.
Serás
corona fúlgida en la mano del Señor
y
diadema real en la palma de tu Dios.
Ya
no te llamarán «Abandonada»,
ni
a tu tierra «Devastada»;
a
ti te llamarán «Mi favorita»,
y
a tu tierra «Desposada»,
porque
el Señor te prefiere a ti,
y
tu tierra tendrá marido.
Como
un joven se casa con su novia,
así
te desposa el que te construyó;
la
alegría que encuentra el marido con su esposa,
la
encontrará tu Dios contigo.
Palabra
de Dios.
Salmo responsorial Sal 88, 4-5. 16-17. 27 y 29 (R.: cf. 2a)
R. Cantaré eternamente tus misericordias, Señor.
Sellé
una alianza con mi elegido,
jurando
a David, mi siervo:
«Te
fundaré un linaje perpetuo,
edificaré
tu trono para todas las edades.» R.
Dichoso
el pueblo que sabe aclamarte:
caminará,
oh Señor, a la luz de tu rostro;
tu
nombre es su gozo cada día,
tu
justicia es su orgullo. R.
Él
me invocará: «Tú eres mi padre,
mi
Dios, mi Roca salvadora.»
Le
mantendré eternamente mi favor,
y
mi alianza con él será estable. R.
SEGUNDA LECTURA
Testimonio de Pablo sobre Cristo, hijo de David
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 13, 16-17. 22-25
Habiendo llegado a Antioquía de Pisidia, Pablo se puso en
pie en la sinagoga y, haciendo seña de que se callaran, dijo:
–«Israelitas
y los que teméis a Dios, escuchad:
El
Dios de este pueblo, Israel, eligió a nuestros padres y multiplicó al pueblo
cuando vivían como forasteros en Egipto. Los sacó de allí con brazo poderoso.
Después
nombró rey a David, de quien hizo esta alabanza:
"Encontré
a David, hijo de Jesé,
hombre
conforme a mi corazón,
que
cumplirá todos mis preceptos."
Según
lo prometido, Dios sacó de su descendencia un salvador para Israel: Jesús.
Antes
de que llegara, Juan predicó a todo Israel un bautismo de conversión; y, cuando
estaba para acabar su vida, decía:
"Yo
no soy quien pensáis; viene uno detrás de mí a quien no merezco desatarle las
sandalias."»
Palabra
de Dios.
Aleluya
Mañana
quedará borrada la maldad de la tierra,
y
será nuestro rey el Salvador del mundo.
EVANGELIO
Genealogía de Jesucristo, hijo de David
+
Lectura del santo evangelio según san Mateo 1, 1-25
Genealogía
de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán. Abrahán engendró a Isaac,
Isaac a Jacob, Jacob a Judá y a sus hermanos. Judá engendró, de Tamar, a Farés
y a Zará, Farés a Esrón, Esrón a Aram, Aram a Aminadab, Aminadab a Naasón,
Naasón a Salmón, Salmón engendró, de Rahab, a Booz; Booz engendró, de Rut, a
Obed; Obed a Jesé, Jesé engendró a David, el rey.
David,
de la mujer de Urías, engendró a Salomón, Salomón a Roboam, Roboam a Abías,
Abías a Asaf, Asaf a Josafat, Josafat a Joram, Joram a Ozías, Ozías a Joatán,
Joatán a Acaz, Acaz a Ezequías, Ezequías engendró a Manasés, Manasés a Amós,
Amós a Josías; Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando el destierro
de Babilonia.
Después
del destierro de Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel a Zorobabel,
Zorobabel a Abiud, Abiud a Eliaquín, Eliaquín a Azor, Azor a Sadoc, Sadoc a
Aquim, Aquim a Eliud, Eliud a Eleazar, Eleazar a Matán, Matán a Jacob; y Jacob
engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo.
Así,
las generaciones desde Abrahán a David fueron en total catorce; desde David
hasta la deportación a Babilonia, catorce; y desde la deportación a Babilonia
hasta el Mesías, catorce.
El
nacimiento de Jesucristo fue de esta manera:
María,
su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella
esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo.
José,
su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió repudiarla en
secreto. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un
ángel del Señor que le dijo:
–«José, hijo de David, no tengas reparo en
llevarte a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del
Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él
salvará a su pueblo de los pecados.»
Todo
esto sucedió para que se cumpliese lo que había dicho el Señor por el Profeta:
«Mirad:
la Virgen concebirá y dará a luz un hijo
y
le pondrá por nombre Emmanuel,
que
significa "Dios–con–nosotros".»
Cuando
José se despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y se llevó a
casa a su mujer.
Y
sin que él hubiera tenido relación con ella, dio a luz un hijo; y él le puso
por nombre Jesús.
Palabra
del Señor.
O
bien más breve:
María dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús
+
Lectura del santo evangelio según san Mateo 1, 18-25
El
nacimiento de Jesucristo fue de esta manera:
María,
su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella
esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo.
José,
su esposo, que era justo y no quería denunciarla, decidió repudiarla en
secreto. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un
ángel del Señor que le dijo:
–«José, hijo de David, no tengas reparo en llevarte a
María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo.
Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su
pueblo de los pecados.»
Todo
esto sucedió para que se cumpliese lo que había dicho el Señor por el Profeta:
«Mirad: la Virgen concebirá y dará a luz un hijo y le
pondrá por nombre Emmanuel, que significa "Dios–con–nosotros".»
Cuando
José se despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y se llevó a
casa a su mujer.
Y sin que él hubiera tenido relación con ella, dio a luz
un hijo; y él le puso por nombre Jesús.
Palabra
del Señor.