viernes, 31 de enero de 2025

SAN JUAN BOSCO, Confesor



31 de enero
SAN JUAN BOSCO,
*
Confesor
Quien quisiere salvar su vida (obrando contra
mí), la perderá; mas quien perdiere su vida
por amor de mí, la encontrará.
(Mt. 16, 25).

   Nacido en 1815, San Juan Bosco, hijo de humildes campesinos, perdió a su padre a la edad de dos años y fue educado por su piadosa madre Margarita. Desde que fue elevado al diaconado, comenzó a reunir, los domingos, a los obreros y niños abandonados de Turín. Construyó para ellos un asilo y una iglesia, dedicada a San Francisco de Sales. En 1854, sentó las bases de una nueva congregación, la de los salesianos, que hoy se llaman sacerdotes de Don Bosco; en 1872, fundó las Hijas de María Auxiliadora. Murió el 31 de enero de 1888, venerado por todo el mundo por su santidad y sus milagros.

VIERNES DE LA TERCERA SEMANA

PRIMERA LECTURA
Soportasteis múltiples combates.
No renunciéis, pues, a vuestra valentía
Lectura de la carta a los Hebreos 10, 32-39
Hermanos: Recordad aquellos días primeros, cuando recién iluminados soportasteis múltiples combates y sufrimientos: ya sea cuando os exponían públicamente a insultos y tormentos, ya cuando os hacíais solidarios de los que así eran tratados.
Pues compartisteis el sufrimiento de los encarcelados, aceptasteis con alegría que os confiscaran los bienes, sabiendo que teníais bienes mejores, y permanentes.
No renunciéis, pues, a vuestra valentía que tendrá una gran recompensa.
Os hace falta constancia para cumplir la voluntad de Dios y alcanzar la promesa.
Un poquito de tiempo todavía y el que viene llegará sin retraso; mi justo vivirá de fe, pero si se arredra le retiraré mi favor.
Pero nosotros no somos gente que se arredra para su perdición, sino hombres de fe para salvar el alma.
Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 36, 3-4. 5-6. 23-24. 39-40
V/. El Señor es quien salva a los justos.
R/. El Señor es quien salva a los justos.

V/. Confía en el Señor y haz el bien, habita tu tierra y practica la lealtad; sea el Señor tu delicia, y él te dará lo que pide tu corazón. R/.

V/. Encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará: hará tu justicia como el amanecer, tu derecho, como el mediodía. R/.

EL Señor asegura los pasos del hombre, se complace en sus caminos; si tropieza, no caerá, porque el Señor lo tiene de la mano. R/.

El Señor es quien salva a los justos, él es su alcázar en el peligro; el Señor los protege y los libra, los libra de los malvados y los salva, porque se acogen a él. R/.


EVANGELIO
Echa simiente, duerme, y la semilla va creciendo sin que él sepa cómo

+Lectura del santo Evangelio según San Marcos 4, 26-34

En aquel tiempo, decía Jesús a las turbas: El Reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra.
El duerme de noche, y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo.
La tierra va produciendo la cosecha ella sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano.
Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega.
Dijo también: ¿Con qué podemos comparar el Reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después, brota, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes, que los pájaros pueden cobijarse y anidar en ellas.
Con muchas parábolas parecidas les exponía la Palabra, acomodándose a su entender.
Todo se lo exponía con parábolas, pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.

Palabra del Señor.
  

jueves, 30 de enero de 2025

SANTA ALDEGUNDA, Virgen

30 de enero
SANTA ALDEGUNDA,
Virgen

Quien no carga con su cruz y me sigue
no es digno de mí.
(Mat. 10, 38).

   Santa Aldegunda nació en Hainaut, de familia ilustre y vinculada con la casa de Francia; empero, sus virtudes la han hecho más célebre que su nacimiento. Rechazó la mano de un príncipe de Inglaterra para seguir a Jesús en la soledad. Allí Jesús, para festejar las bodas de su casta esposa, cambió en vino el agua que ella había tocado, y ordenó a su ángel custodio que la consolara en sus aflicciones. ¿Dónde encontrar sobre la tierra un esposo de tanto poder y de tanta generosidad como el divino Salvador? Adhiérete, pues, a Él, con vínculos indisolubles, Santa Aldegunda murió a fines del siglo VII.

  MEDITACIÓN SOBRE LOS TRES GRADOS
DE LA MORTIFICACIÓN
 
  
   I. Esta santa deja la corte para ir al desierto; las delicias, para vivir en la austeridad; la fortuna de un gran príncipe, para seguir a Jesucristo en la pobreza. Desde hace mucho tiempo Jesús te llama, ¿cuándo lo escucharás? ¡Esta santa supera todos los obstáculos, y a ti la más pequeña dificultad te desalienta! Por más fuertes que sean las cadenas que te atan, fácilmente las romperás si amas a Jesús, y si temes al infierno.

 II. Esta flamante esposa de Jesucristo, después de haber dado prendas de su amor, le pide un obsequio. Escuchad, cristianos descaecidos, la oración de esta santa, y avergonzaos de vuestra cobardía: ella le pide a Dios que le envíe un cáncer que le carcoma el seno, y su oración de inmediato es escuchada. ¿Alguna vez has pedido a Dios algo parecido? Haces promesas a todos los santos para que te libren hasta de la más mínima dolencia que te aqueja. ¡He aquí, sin embargo, las dulzuras de que hace partícipes Jesús a sus amigos; he aquí los favores que éstos le piden

   III. No contenta con dejar los placeres y solicitar los sufrimientos como un favor, pide a Dios la prive de la satisfacción que el hombre experimenta cuando bebe y cuando come. San Pedro le da un poco de maná celestial y todo alimento de la tierra se le vuelve amargo. ¡Qué vergüenza para ti, voluptuoso! ¡Rechaza ella todos los placeres de los sentidos, y tú los buscas afanosamente! Señor, poned amargura en todos mis placeres, a fin de que sólo Vos resultéis dulce a mi corazón.


La mortificación 
Orad por vuestros
superiores temporales.


ORACIÓN
      Escuchadnos, oh Dios, que sois nuestra salvación, a fin de que la fiesta de la bienaventurada Aldegunda, vuestra virgen, al mismo tiempo que regocije nuestra alma la enriquezca con sentimientos de tierna devoción.  Por N. S. J. C. Amén

SANTA MARTINA, Virgen y Mártir



30 de enero
SANTA MARTINA,
*
Virgen y Mártir
Nadie puede servir a dos señores.
(Mateo 6, 24).

   Santa Martina, virgen romana, quedó huérfana a una edad todavía tierna, y distribuyó entre los pobres los cuantiosos bienes que le habían dejado sus padres. Por rehusarse a sacrificar a los ídolos fue sometida a horribles torturas y, después, condenada a ser arrojada a las fieras. Respetada por éstas y habiendo, en seguida, pasado sana y salva por las llamas en las que fuera arrojada, fue, finalmente, decapitada. En el momento de su muerte, un terrible temblor sacudió la ciudad de Roma, y muchos idólatras se convirtieron a la fe cristiana.

JUEVES DE LA TERCERA SEMANA

PRIMERA LECTURA
Llenos de fe, mantengámonos firmes en la esperanza que profesamos; fijémonos los unos en los otros para estimularnos a la caridad

Lectura de la carta a los Hebreos 10, 19-25

Hermanos: Teniendo entrada libre al santuario, en virtud de la sangre de Jesús; contando con el camino nuevo y vivo que él ha inaugurado para nosotros a través de la cortina, o sea, de su carne; y teniendo un gran sacerdote al frente de la casa de Dios, acerquémonos con corazón sincero y llenos de fe, con el corazón purificado de mala conciencia y con el cuerpo lavado en agua pura.
Mantengámonos firmes en la esperanza que profesamos, porque es fiel quien hizo la promesa; fijémonos los unos en los otros para estimularnos a la caridad y a las buenas obras.
No desertéis de las asambleas, como algunos tienen por costumbre, sino animaos tanto más cuanto más cercano, véis el Día.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 23, 1-2. 3-4. 5-6
V/. Estos son los que buscan al Señor.
R/. Estos son los que buscan al Señor.
V/. Del Señor es la tierra y cuanto la llena, el orbe y todos sus habitantes: él la fundó sobre los mares, él la afianzó sobre los ríos. R/.
V/. ¿Quién puede subir al monte del Señor ? ¿Quién puede estar en el recinto sacro ? EL hombre de manos inocentes,
y puro corazón,
que no confía en los ídolos. R/.
V/. Ese recibirá la bendición del Señor,
le hará justicia el Dios de salvación.
Este es el grupo que busca al Señor,
que viene a tu presencia, Dios de Jacob. R/.

EVANGELIO
El candil se trae para ponerlo en el candelero.
La medida que uséis la usarán con vosotros

+ Lectura del santo Evangelio según San Marcos 4, 21-25

En aquel tiempo, dijo Jesús a la muchedumbre: ¿Se trae el candil para meterlo debajo del celemín o debajo de la cama, o para ponerlo en el candelero? Si se esconde algo es para que se descubra; si algo se hace a ocultas, es para que salga a la luz.
El que tenga oídos para oír que oiga.
Les dijo también: Atención a lo que estáis oyendo: La medida que uséis la usarán con vosotros, y con creces.
Porque al que tiene se le dará, y al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene.
Palabra del Señor

miércoles, 29 de enero de 2025

SAN SABINIANO, Mártir

29 de enero
SAN SABINIANO,(*)
Mártir
(Fecha desconocida)

   El Martirologio Romano conmemora a San Sabiniano en este día y la diócesis de Troyes le venera como primer apóstol y mártir de la ciudad del mismo nombre. Existen tres "actas" de San Sabiniano y su martirio, ninguna de las cuales tiene valor histórico. Se cuenta que Sabiniano nació en la isla de Samos; que se convirtió al cristianismo leyendo la Biblia; que fue a predicar el Evangelio en la Galia, antes de ser bautizado; que recibió el bautismo directamente del cielo (ya que una voz sobrenatural pronunció las palabras sacramentales), que fue hecho prisionero por haber efectuado numerosas conversiones, y que compareció valerosamente ante el emperador Aureliano. Tras una serie de incidentes milagrosos, como por ejemplo el de que el fuego no le consumió y que las flechas no le atravesaron, fue finalmente decapitado por la espada. No parece haber ninguna tradición primitiva en apoyo de su culto, de suerte que lo único que podemos afirmar es que un mártir llamado Sabiniano murió probablemente en Troyes, víctima de una de las primeras persecuciones.


   Ver Acta Sanctorum, 29 de enero; E. Defer, Vie des saints du diocéses de Troyes, pp. 27-36; Analecto Bollandiana, vol. IV (1885), pp. 139-156.    

MIÉRCOLES DE LA TERCERA SEMANA


PRIMERA LECTURA
Ha perfeccionado para siempre a los que van siendo consagrados

Lectura de la carta a los Hebreos 10, 11-18

Hermanos: Cualquier otro sacerdote ejerce su ministerio diariamente ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, porque de ningún modo pueden borrar los pecados.
Pero Cristo ofreció por los pecados, para siempre jamás, un sacrificio; está sentado a la derecha de Dios y espera el tiempo que falta hasta que sus enemigos sean puestos como estrado de sus pies.
Con una sola ofrenda ha perfeccionado para siempre a los que van siendo consagrados.
Esto nos lo atestigua también el Espíritu Santo.
En efecto, después de decir: «Así será la alianza que haré con ellos después de aquellos días» ,
añade el Señor: «Pondré mis leyes en sus corazones y las escribiré en su mente,
y no me acordaré ya de sus pecados ni de sus culpas».
Donde hay perdón, no hay ofrenda por los pecados.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 109, 1. 2. 3. 4

V/. «Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec».
R/. «Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec».
V/. Oráculo del Señor a mi Señor: «siéntate a mi derecha, y haré de tus enemigos estrado de tus pies». R/.
V/. Desde Sión extenderá el Señor el poder de tu cetro: somete en la batalla a tus enemigos. R/.
V/. «Eres príncipe desde el día de tu nacimiento, entre esplendores sagrados;
yo mismo te engendré como rocío, antes de la aurora». R/.
V/. EL Señor lo ha jurado y no se arrepiente: «Tú eres sacerdote eterno, según el rito de Melquisedec». R/.


EVANGELIO
Salió el sembrador a sembrar.

+Lectura del santo Evangelio según San Marcos 4, 1-20

En aquel tiempo, Jesús se puso a enseñar otra vez junto al lago.
Acudió un gentío tan enorme, que tuvo que subirse a una barca; se sentó y el gentío se quedó en la orilla.
Les enseñó mucho rato con parábolas, como él solía enseñar: Escuchad: Salió el sembrador a sembrar; al sembrar, algo cayó al borde del camino, vinieron los pájaros y se lo comieron.
Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra; como la tierra no era profunda, brotó enseguida; pero en cuanto salió el sol, se abrasó y, por falta de raíz, se secó.
Otro poco cayó entre zarzas; las zarzas crecieron, lo ahogaron y no dio grano.
El resto cayó en tierra buena; nació, creció y dio grano; y la cosecha fue del treinta o del sesenta o del ciento por uno.
Y añadió: El que tenga oídos para oír que oiga.
Cuando se quedó solo, los que estaban alrededor y los Doce le preguntaban el sentido de las parábolas.
El les dijo: A vosotros se os han comunicado los secretos del reino de Dios; en cambio a los de fuera todo se les presenta en parábolas, para que «por más que miren, no vean, por más que oigan, no entiendan, no sea que se conviertan y los perdone».
Y añadió: ¿No entendéis esta parábola ? ¿Pues cómo vais a entender las demás ? El sembrador siembra la palabra.
Hay unos que están al borde del camino donde se siembra la palabra; pero en cuanto la escuchan, viene Satanás y se lleva la palabra sembrada en ellos.
Hay otros que reciben la simiente como terreno pedregoso, al escucharla la acogen con alegría, pero no tienen raíces, son inconstantes, y cuando viene una dificultad o persecución por la Palabra, enseguida sucumben.
Hay otros que reciben la simiente entre zarzas; éstos son los que escuchan la Palabra, pero los afanes de la vida, la seducción de las riquezas y el deseo de todo lo demás los invaden, ahogan la Palabra, y se queda estéril.
Los otros son los que reciben la simiente en tierra buena; escuchan la Palabra, la aceptan y dan una cosecha del treinta o del sesenta o del ciento por uno.

Palabra del Señor

SANTA RADEGUNDIS, Virgen

29 de enero
SANTA RADEGUNDIS
Virgen

Nos has hecho para ti, Señor,
y nuestro corazón estará insatisfecho

hasta que descanse en ti.
(San Agustín)
   
   Se desconoce todo lo que se refiere a su nacimiento. El martirologio romano la llama Radegundis y es una de las gloriosas vírgenes que ha dado España. Aparece como la última religiosa del monasterio de San Pablo, en Burgos, que perteneció a la Orden Premostratense. La extrema pobreza llevó a la extinción a este monasterio que quedó anexionado al de san Miguel de Treviño. 

   Llevada por sus deseos irresistibles de visitar los Santos Lugares de Roma, donde murieron tantos mártires y donde reside el Vicario de Cristo, marcha a la Ciudad Eterna. Tiene en su contra la poca salud que disfruta y los pocos medios de que dispone para tan largo, peligroso y costoso viaje; pero el fervor puede más que los miedos. Saciada y llena de agradecimiento al Señor, animada por los besos puestos en las calles que pisaron los mártires, venerados los monumentos, regresa con numerosas reliquias. Ahora solo quiere soledad y retiro. 

   Junto al monasterio de San Miguel habita en una pobre y mísera habitación que tiene un ventanuco por donde puede presenciar los santos oficios de la iglesia. No cambiaría aquel sitio por el mejor palacio. Solo piensa en ser agradable a su Divino Esposo. Vive como los antiguos anacoretas del desierto y la gente del pueblo comenta con asombro sus penitencias, ayuno y oración. 

   Muere el 29 de enero del año 1152, cuando reina en Castilla Alfonso VI y es Papa Eugenio III. Es sepultada en la iglesia de San Miguel de Treviño, donde sus reliquias son veneradas a través de los siglos.

martes, 28 de enero de 2025

SANTO TOMÁS DE AQUINO, Confesor, Presbítero y Doctor

28 de enero
SANTO TOMÁS DE AQUINO,
Confesor, Presbítero y Doctor






                                                Bienaventurados los mansos,

                                              porque ellos poseerán la tierra.
(Mateo, 5,14).




   Santo Tomás de Aquino es para la Iglesia, lo que el sol para el mundo. La ilustró con su ciencia y con su santidad. Desde los 5 años de edad rezaba dos horas diarias. Entró en la Orden de Santo Domingo, y en ella perseveró después de resistir con entereza las amenazas de sus parientes, que se esforzaron por hacerlo renunciar a su vocación. Todos los días celebraba una misa y oía otra. A los pies del crucifijo era donde buscaba la solución de las dificultades que encontraba en el estudio de la teología. Murió en 1274.

MEDITACIÓN
SOBRE SANTO TOMAS 

   I. Santo Tomás fue para la Iglesia como un sol refulgente. Su prodigiosa erudición le valió el título de Doctor Angélico. Sus escritos tuvieron por única finalidad hacer conocer cuán admirable es Dios, en sí mismo y en sus obras. Mereció, así, oír de labios mismos de Nuestro Señor: Tomás, bien has escrito de mí, ¿qué recompensa pides? ¿Qué hubieras respondido tú, que estudias sólo por vanidad, por curiosidad, por interés? Este santo no quiso otra recompensa que a Dios mismo. Si en tus estudios y trabajos buscas otra cosa que no sea la gloria de Dios y tu salvación y la del prójimo, pierdes el tiempo.
 
   II. Este sol ha enfervorizado tanto como ha iluminado; abrasaba el corazón de los demás con el fuego del amor divino, porque el suyo estaba enteramente penetrado de él. Vamos, con Santo Tomás, a buscar este sagrado fuego en el Corazón del Salvador: en él aprenderemos la ciencia de los santos, sin la cual nuestras luces no son sino relumbrones que nos llevarán al precipicio. Para nada sirve la erudición, si la ciencia de Dios no la corona. (San Jerónimo).
 
   III. El consejo es de perenne actualidad. En vano brillara Santo Tomás con tanto fulgor, si no hubiera trabajado por la gloria de Dios; mas su virtud no era menos admirable que su ciencia, y lo que a otros enseñaba, él era el primero en practicar. Hombres sabios, Dios espera mucho de vosotros: más culpables seréis que los otros si no sois virtuosos. Humillémonos a ejemplo de Santo Tomás, porque todo lo que tenemos proviene de Dios. De nada hemos de gloriarnos, porque nada es nuestro. (San Cipriano).
 
El apego a la oración
Orad por los escolares.
 
ORACIÓN
   Oh Dios, que iluminasteis a vuestra Iglesia mediante la maravillosa erudición de vuestro bienaventurado confesor Santo Tomás, y que la fecundáis mediante la santidad de sus obras, concedednos la gracia de comprender sus enseñanzas e imitar sus virtudes. Por J. C. N. S. Amén.

28 Enero. MARTES DE LA TERCERA SEMANA. SANTO TOMÁS DE AQUINO, presbítero y doctor de la Iglesia, memoria obligatoria

PRIMERA LECTURA
Aquí estoy, ¡oh Dios! , para hacer tu voluntad

Lectura de la carta a los Hebreos 10, 1-10

Hermanos: La Ley, que presenta sólo un vislumbre de los bienes futuros y no la imagen auténtica de la realidad, siempre, con los mismos sacrificios, año tras año, no puede nunca hacer perfectos a los que se acercan a ofrecerlos.
Si no fuera así, habrían dejado de ofrecerse, porque los ministros del culto, purificados una vez, no tendrían ya ningún pecado sobre su ¿conciencia.
Pero en estos mismos sacrificios se recuerdan los pecados año tras año.
Porque es imposible que la sangre de los toros y de los machos cabríos quite los pecados.
Por eso, cuando Cristo entró en el mundo dijo: —Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, pero me has preparado un cuerpo; no aceptas holocaustos ni víctimas expiatorias.
Entonces yo dije lo que está escrito en el libro: «Aquí estoy, ¡oh Dios ! , para hacer tu voluntad».
Primero dice: No quieres ni aceptas sacrificios ni ofrendas, holocaustos ni víctimas expiatorias, —que se ofrecen según la ley—.
Después añade: «Aquí estoy yo para hacer tu voluntad».
Niega lo primero, para afirmar lo segundo.
Y conforme a esa voluntad todos quedamos santificados por la oblación del cuerpo de Jesucristo, hecha una vez para siempre.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 39, 2 y 4ab. 7-8a. 10. 11
V/. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
R/. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.


V/. Yo esperaba con ansia al Señor: él se inclinó y escuchó mi grito; me puso en la boca un cántico nuevo, un himno a nuestro Dios. R/.


V/. Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y en cambio me abriste el oído; no pides sacrificio expiatorio, entonces yo digo: «Aquí estoy». R/.


V/. He proclamado tu salvación ante la gran asamblea; no he cerrado los labios: Señor, tú lo sabes. R/.


V/. No he guardado en el pecho tu defensa, he contado tu fidelidad y tu salvación, no he negado tu misericordia y tu lealtad, ante la gran asamblea. R/.



EVANGELIO
El que cumple la voluntad de Dios, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre

Lectura del santo Evangelio según San Marcos 3, 31-35

En aquel tiempo, llegaron la madre y los hermanos de Jesús, y desde fuera lo mandaron llamar.
La gente que tenía sentada alrededor le dijo: Mira, tu madre y tus hermanos están fuera y te buscan.
Les contestó: ¿Quiénes son mi madre y mis hermanos? Y paseando la mirada por el corro, dijo: Estos son mi madre y mis hermanos.
El que cumple la voluntad de Dios, ése es mi hermano y mi hermana y mi madre.

Palabra del Señor. 

lunes, 27 de enero de 2025

SANTA ÁNGELA DE MERICI, Virgen

27 de Enero
SANTA ÁNGELA
DE MERICI,

Virgen


 Quien guardare y enseñare mis mandamientos, grande
será llamado en el reino de los cielos.
(Mateo, 5,19).
 
   La gloria de los servicios inmensos prestados a la religión y a la sociedad desde hace más de tres siglos por las religiosas ursulinas, recae, después de Dios, en la santa cuya fiesta celebramos hoy. Una visión que tuvo un día mientras estaba en oración, la confirmó en el proyecto que había concebido de consagrarse a la instrucción cristiana de la juventud de su sexo. Con este objeto, asoció a algunas vírgenes cristianas, les redactó un reglamento de vida y dio a la congregación el nombre de Ursulinas, temiendo que, después, se la llamase con su nombre. La nueva sociedad hizo un bien inmenso en Brescia y sus alrededores, Y fue elevada al rango de orden religiosa cuatro años después de la muerte de Ángela, que acaeció el 27 de enero de 1540.

27 Enero. LUNES DE LA TERCERA SEMANA.


PRIMERA LECTURA
Se ha ofrecido una sola vez para quitar los pecados.
La segunda vez aparecerá a los que lo esperan

Lectura de la carta a los Hebreos 9, 15. 24-28

Hermanos: Cristo es mediador de una alianza nueva: en ella ha habido una muerte que ha redimido de los pecados cometidos durante la primera alianza; y así los llamados pueden recibir la promesa de la herencia eterna.
Pues Cristo ha entrado no en un santuario construido por hombres—imagen del auténtico—, sino en el mismo cielo, para ponerse ante Dios, intercediendo por nosotros.
Tampoco se ofrece a sí mismo muchas veces—como el sumo sacerdote que entraba en el santuario todos los años y ofrecía sangre ajena.
Si hubiese sido así, Cristo tendría que haber padecido muchas veces, desde el principio del mundo—.
De hecho, él se ha manifestado una sola vez, en el momento culminante de la historia, para destruir el pecado con el sacrificio de sí mismo.
El destino de los hombres es morir una sola vez. Y después de la muerte, el juicio.
De la misma manera, Cristo se ha ofrecido una sola vez para quitar los pecados de todos.
La segunda vez aparecerá, sin ninguna relación al pecado, para salvar definitivamente a los que lo esperan.
Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 97, 1. 2-3ab. 3cd-4. 5-6
V/. Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas.
R/. Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas.

V/. Cantad al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas: su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R/.

V/. El Señor da a conocer su victoria revela a las naciones su justicia: se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.

V/. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.
Aclama al Señor, tierra entera, gritad, vitoread, tocad. R/.

V/. Tocad la cítara para el Señor, suenen los instrumentos: con clarines y al son de trompetas aclamad al Rey y Señor. R/.


EVANGELIO
Satanás está perdido

+Lectura del santo Evangelio según San Marcos 3, 22-30

En aquel tiempo, unos letrados de Jerusalén decían: Tiene dentro a Belzebú y expulsa a los demonios con el poder del jefe de los demonios.
El los invitó a acercarse y les puso estas comparaciones: ¿Cómo va a echar Satanás a Satanás? Un reino en guerra civil, no puede subsistir; una familia dividida, no puede subsistir.
Si Satanás se rebela contra sí mismo, para hacerse la guerra, no puede subsistir, está perdido.
Nadie puede meterse en casa de un hombre forzudo para arramblar con su ajuar, si primero no lo ata; entonces podrá arramblar con la casa.
Creedme, todo se les podrá perdonar a los hombres: los pecados y cualquier blasfemia que digan; pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo no tendrá perdón jamás, cargará con su pecado para siempre.
Se refería a los que decían que tenía dentro un espíritu inmundo.

Palabra del Señor.

sábado, 25 de enero de 2025

DOMINGO III DEL TIEMPO ORDINARIO

PRIMERA LECTURA
Leían el libro de la Ley, explicando el sentido

Lectura del libro de Nehemías 8, 2-4a. 5-6. 8-10

En aquellos días, el sacerdote Esdras trajo el libro de la Ley ante la asamblea, compuesta de hombres, mujeres y todos los que tenían uso de razón. Era mediados del mes séptimo. En la plaza de la Puerta del Agua, desde el amanecer hasta el mediodía, estuvo leyendo el libro a los hombres, a las mujeres y a los que tenían uso de razón. Toda la gente seguía con atención la lectura de la Ley.
Esdras, el escriba, estaba de pie en el púlpito de madera que había hecho para esta ocasión. Esdras abrió el libro a la vista de todo el pueblo —pues se hallaba en un puesto elevado— y cuando lo abrió, toda la gente se puso en pie. Esdras bendijo al Señor, Dios grande, y todo el pueblo, levantando las manos, respondió:
—«Amén, amén.»
Después se inclinaron y adoraron al Señor, rostro en tierra.
Los levitas leían el libro de la ley de Dios con claridad y explicando el sentido, de forma que comprendieron la lectura. Nehemias, el gobernador, Esdras, el sacerdote y escriba, y los levitas que enseñaban al pueblo decían al pueblo entero:
—«Hoy es un día consagrado a nuestro Dios: No hagáis duelo ni lloréis.»
Porque el pueblo entero lloraba al escuchar las palabras de la Ley. 
Y añadieron:
—«Andad, comed buenas tajadas, bebed vino dulce y enviad porciones a quien no tiene, pues es un día consagrado a nuestro Dios. No estéis tristes, pues el gozo en el Señor es vuestra fortaleza.»
Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 18, 8. 9. 10. 15 (R.: Jn 6, 63c)

R. Tus palabras, Señor, son espíritu y vida.
La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma; el precepto del Señor es fiel e instruye al ignorante. R.
Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón; la norma del Señor es límpida y da luz a los ojos. R.
La voluntad del Señor es pura y eternamente estable; los mandamientos del Señor son verdaderos y enteramente justos. R.
Que te agraden las palabras de mi boca, y llegue a tu presencia el meditar de mi corazón, Señor, roca mía, redentor mío. R.

SEGUNDA LECTURA
Vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno es un miembro

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 12, 12-30

Hermanos:
Lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo.
Todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu.
El cuerpo tiene muchos miembros, no uno solo.
Si el pie dijera: «No soy mano, luego no formo parte del cuerpo», ¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Si el oído dijera: «No soy ojo, luego no formo parte del cuerpo», ¿dejaría por eso de ser parte del cuerpo? Si el cuerpo entero fuera ojo, ¿cómo oiría? Si el cuerpo entero fuera oído, ¿cómo olería? Pues bien, Dios distribuyó el cuerpo y cada uno de los miembros como él quiso.
Si todos fueran un mismo miembro, ¿dónde estaría el cuerpo?
Los miembros son muchos, es verdad, pero el cuerpo es uno solo.
El ojo no puede decir a la mano: «No te necesito»; y la cabeza no puede decir a los pies: «No os necesito.» Más aún, los miembros que parecen más débiles son más necesarios. Los que nos parecen despreciables, los apreciamos más. Los menos decentes, los tratamos con más decoro. Porque los miembros más decentes no lo necesitan.
Ahora bien, Dios organizó los miembros del cuerpo dando mayor honor a los que menos valían.
Así, no hay divisiones en el cuerpo, porque todos los miembros por igual se preocupan unos de otros.
Cuando un miembro sufre, todos sufren con él; cuando un miembro es honrado, todos se felicitan.
Pues bien, vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno es un miembro.
Y Dios os ha distribuido en la Iglesia: en el primer puesto los apóstoles, en el segundo los profetas, en el tercero los maestros, después vienen los milagros, luego el don de curar, la beneficencia, el gobierno, la diversidad de lenguas.
¿Acaso son todos apóstoles? ¿O todos son profetas? ¿O todos maestros? ¿O hacen todos milagros? ¿Tienen todos don para curar? ¿Hablan todos en lenguas o todos las interpretan?
Palabra de Dios.

O bien más breve:
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 12, 12-14. 27
Hermanos:
Lo mismo que el cuerpo es uno y tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, así es también Cristo.
Todos nosotros, judíos y griegos, esclavos y libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu, para formar un solo cuerpo. Y todos hemos bebido de un solo Espíritu.
El cuerpo tiene muchos miembros, no uno solo.
Pues bien, vosotros sois el cuerpo de Cristo, y cada uno es un miembro.
Palabra de Dios.

Aleluya Lc 4, 18
El Señor me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad.

EVANGELIO
Hoy se cumple esta Escritura

+ Lectura del santo evangelio según san Lucas 1, 1-4; 4, 14-21

Excelentísimo Teófilo:
Muchos han emprendido la tarea de componer un relato de los hechos que se han verificado entre nosotros, siguiendo las tradiciones transmitidas por los que primero fueron testigos oculares y luego predicadores de la palabra. Yo también, después de comprobarlo todo exactamente desde el principio, he resuelto escribírtelos por su orden, para que conozcas la solidez de las enseñanzas que has recibido.
En aquel tiempo, Jesús volvió a Galilea con la fuerza del Espíritu; y su fama se extendió por toda la comarca. Enseñaba en las sinagogas, y todos lo alababan.
Fue a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito:
«El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido.
Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos, la vista.
Para dar libertad a los oprimidos; para anunciar el año de gracia del Señor.»
Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles:
—«Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.»
Palabra del Señor.

LA CONVERSIÓN DE SAN PABLO

25 de enero
LA CONVERSIÓN
DE
SAN PABLO*
 
 

Éste es un vaso de elección que elegí para que lleve
mi nombre ante los gentiles.
(Hechos de los Apóstoles, 9, 15).

   San Pablo es derribado en el camino a Damasco, y de perseguidor de cristianos se convierte en apóstol de Cristo. El Señor le envía a Ananías para devolverle la vista y administrarle el santo Bautismo. El Apóstol novel permanece algunos días con los discípulos de Damasco, y, en seguida, se pone a predicar a Jesús en las sinagogas, asegurando que es el Hijo de Dios.

25 de enero. LA CONVERSIÓN DEL APÓSTOL SAN PABLO, Fiesta

PRIMERA LECTURA
Levántate, recibe el bautismo que, por la invocación del nombre de Jesús, lavará tus pecados

Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 22, 3-16

En aquellos días, dijo Pablo al pueblo:
-«Yo soy judío, nací en Tarso de Cilicia, pero me crié en esta ciudad; fui alumno de Gamaliel y aprendí hasta el último detalle de la ley de nuestros padres; he servido a Dios con tanto fervor como vosotros mostráis ahora. Yo perseguí a muerte este nuevo camino, metiendo en la cárcel, encadenados, a hombres y mujeres; y son testigos de esto el mismo sumo sacerdote y todos los ancianos. Ellos me dieron cartas para los hermanos de Damasco, y fui allí para traerme presos a Jerusalén a los que encontrase, para que los castigaran.
Pero en el viaje, cerca ya de Damasco, hacia mediodía, de repente una gran luz del cielo me envolvió con su resplandor, caí por tierra y oí una voz que me decía:
“Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?”
Yo pregunté:
“¿Quién eres, Señor ?”
Me respondió:
“Yo soy Jesús Nazareno, a quien tú persigues.”
Mis compañeros vieron el resplandor, pero no comprendieron lo que decía la voz.
Yo pregunté:
“¿Qué debo hacer, Señor?”
El Señor me respondió:
“Levántate, sigue hasta Damasco, y allí te dirán lo que tienes que hacer.”
Como yo no veía, cegado por el resplandor de aquella luz, mis compañeros me llevaron de la mano a Damasco.
Un cierto Ananías, devoto de la Ley, recomendado por todos los judíos de la ciudad, vino a verme, se puso a mi lado y me dijo:
“Saulo, hermano, recobra la vista.”
Inmediatamente recobré la vista y lo vi.
Él me dijo:
“El Dios de nuestros padres te ha elegido para que conozcas su voluntad, para que vieras al Justo y oyeras su voz, porque vas a ser su testigo ante todos los hombres, de lo que has visto y oído. Ahora, no pierdas tiempo; levántate, recibe el bautismo que, por la invocación de su nombre, lavará tus pecados.”»
Palabra de Dios.

O bien:
Te dirán lo que tienes que hacer
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 9, 1-22

En aquellos días, Saulo seguía echando amenazas de muerte contra los discípulos del Señor. Fue a ver al sumo sacerdote y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, autorizándolo a traerse presos a Jerusalén a todos los que seguían el nuevo camino, hombres y mujeres.
En el viaje, cerca ya de Damasco, de repente, una luz celeste lo envolvió con su resplandor. Cayó a tierra y oyó una voz que le decía:
-«Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?»
Preguntó él:
-«¿Quién eres, Señor?»
Respondió la voz:
-«Soy Jesús, a quien tú persigues. Levántate, entra en la ciudad, y allí te dirán lo que tienes que hacer.»
Sus compañeros de viaje se quedaron mudos de estupor, porque oían la voz, pero no veían a nadie. Saulo se levantó del suelo y, aunque tenía los ojos abiertos, no veía. Lo llevaron de la mano hasta Damasco. Allí estuvo tres días ciego, sin comer ni beber.
Había en Damasco un discípulo, que se llamaba Ananías. El Señor lo llamó en una visión:
-«Ananías.»
Respondió él:
-«Aquí estoy, Señor.»
El Señor le dijo:
-«Ve a la calle Mayor, a casa de Judas, y pregunta por un tal Saulo de Tarso. Está orando, y ha visto a un cierto Ananías que entra y le impone las manos para que recobre la vista.»
Ananías contestó:
-«Señor, he oído a muchos hablar de ese individuo y del daño que ha hecho a tus santos en Jerusalén. Además, trae autorización de los sumos sacerdotes para llevarse presos a todos los que invocan tu nombre.»
El Señor le dijo:
-«Anda, ve; que ese hombre es un instrumento elegido por mí para dar- a conocer mi nombre a pueblos y reyes, y a los israelitas. Yo le enseñaré lo que tiene que sufrir por mi nombre.»
Salió Ananías, entro en la casa, le impuso las manos y dijo:
-«Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció cuando venías por el camino, me ha enviado para que recobres la vista y te llenes de Espíritu Santo.»
Inmediatamente se le cayeron de los ojos una especie de escamas, y recobró la vista. Se levantó, y lo bautizaron. Comió, y le volvieron las fuerzas.
Se quedó unos días con los discípulos de Damasco, y luego se puso a predicar en las sinagogas, afirmando que Jesús es el Hijo de Dios. Los oyentes quedaban pasmados y comentaban:
-«¿No es éste el que se ensañaba en Jerusalén contra los que invocan ese nombre? Y, ¿no había venido aquí precisamente para llevárselos detenidos a los sumos sacerdotes?»
Pero Pablo se crecía y tenía confundidos a los judíos de Damasco, demostrando que Jesús es el Mesías.
Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 116, 1. 2 (R.: Mc 16, 15)
R. Id al mundo entero y proclamad el Evangelio.
O bien:
Aleluya.

Alabad al Señor, todas las naciones, aclamadlo, todos los pueblos. R.


Firme es su misericordia con nosotros, su fidelidad dura por siempre. R.

Aleluya Cf. Jn 15, 16
Yo os he elegido del mundo, para que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto dure -dice el Señor-.

EVANGELIO
Id al mundo entero y proclamad el Evangelio

 +Lectura del santo evangelio según san Marcos 16, 15-18

En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo:
-«Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación.
El que crea y se bautice se salvará; el que se resista a creer será condenado.
A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos.»

Palabra del Señor.

viernes, 24 de enero de 2025

SAN FRANCISCO DE SALES, Obispo, Confesor y Doctor



24 de enero
SAN FRANCISCO DE SALES,
*
Obispo, Confesor y Doctor
Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón;
y hallaréis el reposo para vuestras almas.
(Mat. 11,29).

   Este santo ha sido la gloria de su siglo, el modelo de los hombres apostólicos y de los obispos, el doctor universal de la piedad y del amor de Dios. Su cuerpo en Annecy y su corazón en Lyon han obrado infinidad de milagros devolviendo la salud a los cuerpos; pero su espíritu, siempre vivo en sus libros, obra maravillas mucho más sorprendentes convirtiendo a los pecadores. Tan llena está su vida de nobles acciones, que es difícil resumirla; tan conocida de todos, por otra parte, que no es necesario referirla. Murió en Lyón en 1622.

VIERNES DE LA SEGUNDA SEMANA

PRIMERA LECTURA
Es mediador de una alianza mejor

Lectura de la carta a los Hebreos 8, 6-13

Hermanos: Ahora a nuestro Sumo Sacerdote le ha correspondido un ministerio tanto más excelente, cuanto mejor es la alianza de la que es mediador, una alianza basada en promesas mejores.
En efecto, si la primera hubiera sido perfecta, no tendría objeto la segunda.
Pero a los antiguos les echa en cara: «Mirad que llegan días —oráculo del Señor— en que haré con la Casa de Israel
y con la Casa de Judá una alianza nueva;
no como la alianza que hice con sus padres, cuando los tomé de la mano para sacarlos de Egipto.
Ellos fueron infieles a mi alianza y yo me desentendí de ellos—oráculo del Señor—
Así será la alianza que haré con la Casa de Israel después de aquellos días—oráculo del Señor—: pondré mis leyes en su mente y las escribiré en sus corazones;
yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.
Y no tendrá que enseñar uno a su prójimo, el otro a su hermano, diciendo: «¡Conoce al Señor! » ,
porque todos me conocerán, del menor al mayor,
pues perdonaré sus delitos y no me acordaré ya de sus pecados».
Al decir alianza «nueva» , dejó anticuada la anterior; y lo que está anticuado y se hace viejo está a punto de desaparecer.

Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 84, 8 y 10. 11-12. 13-14

V/. La misericordia y la fidelidad se encuentran.
R/. La misericordia y la fidelidad se encuentran.
V/. Muéstranos, Señor, tu misericordia
y danos tu salvación.
La salvación está ya cerca de sus fieles y la gloria habitará en nuestra tierra. R/.
V/. La misericordia y la fidelidad se encuentran, la justicia y la paz se besan;
la fidelidad brota de la tierra y la justicia mira desde el cielo. R/.
V/. EL Señor nos dará la lluvia, y nuestra tierra dará su fruto.
La justicia marchará ante él,
la salvación seguirá sus pasos. R/.


EVANGELIO
Llamó a los que quiso y los hizo sus compañeros

+ Lectura del santo Evangelio según San Marcos 3, 13-19

En aquel tiempo, Jesús subió a la montaña, llamó a los que quiso, y se fueron con él.
A doce los hizo sus compañeros, para enviarlos a predicar, con poder para expulsar demonios: Simón, a quien dio el sobrenombre de Pedro, Santiago el de Zebedeo y su hermano Juan, a quienes dio el sobrenombre de Boanerges─Los Truenos─, Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago el de Alfeo, Tadeo, Simón el Cananeo y Judas Iscariote, que lo entregó.

Palabra del Señor

jueves, 23 de enero de 2025

JUEVES DE LA SEGUNDA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

PRIMERA LECTURA
Ofreció sacrificios de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo

Lectura de la carta a los Hebreos 7, 25—8, 6

Hermanos: Jesús puede salvar definitivamente a los que por medio de él se acercan a Dios, porque vive siempre para interceder en su favor.
Y tal convenía que fuese nuestro Pontífice: santo, inocente, sin mancha, separado de los pecadores y encumbrado sobre el cielo.
El no necesita ofrecer sacrificios cada día—como los sumos sacerdotes, que ofrecían primero por los propios pecados, después por los del pueblo—, porque lo hizo de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo.
En efecto, la ley hace a los hombres sacerdotes llenos de debilidades.
En cambio, las palabras del juramento, posterior a la ley, consagran al Hijo, perfecto para siempre.
Esto es lo principal de todo el discurso: Tenemos un Sumo Sacerdote tal que está sentado a la derecha del trono de la Majestad en los cielos, y es ministro del Santuario y de la Tienda verdadera, construida por el Señor y no por hombre.
En efecto, todo Sumo Sacerdote está puesto para ofrecer dones y sacrificios; de ahí la necesidad de que también éste tenga algo que ofrecer.
Ahora bien, si estuviera en la tierra, no sería siquiera sacerdote, habiendo otros que ofrecen los dones según la Ley.
Estos sacerdotes están al servicio de una copia y vislumbre de las cosas celestes, según el oráculo que recibió Moisés cuando iba a construir la Tienda: Mira, le dijo Dios, te ajustarás al modelo que te fue mostrado en la montaña.
Mas ahora a Cristo le ha correspondido un ministerio tanto más excelente, cuanto mejor es la alianza de la que es mediador, una alianza basada en promesas mejores.

Palabra de Dios

Salmo responsorial Sal 39, 7-8a. 8b-9. 10. 17

V/. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
R/. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
V/. Tú no quieres sacrificios ni ofrendas, y en cambio me abriste el oído;
no pides sacrificio expiatorio, entonces yo digo: «Aquí estoy». R/.
V/. Como está escrito en mi libro: «para hacer tu voluntad».
Dios mío, lo quiero, y llevo tu ley en las entrañas. R/.
V/. He proclamado tu salvación ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios: Señor, tú lo sabes. R/.
Alégrense y gocen contigo, todos los que te buscan;
digan siempre: «Grande es el Señor» , los que desean tu salvación. R/.


EVANGELIO
Los espíritus inmundos gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios» , pero Jesús les prohibía que lo diesen a conocer

+ Lectura del santo Evangelio según San Marcos 3, 7-12

En aquel tiempo, Jesús se retiró con sus discípulos a la orilla del lago, y lo siguió una muchedumbre de Galilea.
Al enterarse de las cosas que hacía, acudía mucha gente de Judea, de Jerusalén y de Idumea, de la Transjordania, de las cercanías de Tiro y Sidón.
Encargó a sus discípulos que le tuviesen preparada una lancha, no lo fuera a estrujar el gentío.
Como había curado a muchos, todos los que sufrían de algo se le echaban encima para tocarlo.
Cuando lo veían, hasta los espíritus inmundos se postraban ante él, gritando: Tú eres el Hijo de Dios.
Pero él les prohibía severamente que lo diesen a conocer.

Palabra del Señor

martes, 21 de enero de 2025

SANTA INÉS, Virgen y Mártir



21 de enero
SANTA INÉS,
*
Virgen y Mártir
Gocémonos, y saltemos de júbilo  y demos gloria a Dios,
pues han llegado las bodas del Cordero y su
esposa se ha engalanado.
(Apocalipsis, 19, 7).

   He aquí a la esposa del Cordero de Dios. Búrlase ella para conservar su cuerpo y su corazón para su esposo Jesús, de las proposiciones y de las amenazas del tirano. Los ángeles la acompañan a un lugar infame, y dan muerte al insolente que quiere arrebatarle la honra; mas ella devuélvele la vida y lo convierte a la fe. Se la echa al fuego, pero el fuego respeta a la tierna virgen y da muerte a los verdugos. Condenada, finalmente, a ser decapitada, inclina la cabeza y va al cielo a juntarse con su Esposo divino a quien prometiera fidelidad.

lunes, 20 de enero de 2025

SANTOS FABIÁN Y SEBASTIÁN, Mártires



20 de enero
SANTOS FABIÁN Y SEBASTIÁN,
*
Mártires
Entrad por la puerta angosta, porque la puerta ancha
 y el camino espacioso son los que conducen a la perdición,
y son muchos los que entran por él.
(Mateo, 7,13).
  
   Fabián era un laico cuando fue elegido para suceder al Papa Antero, en el año 236. Una paloma bajó del cielo, se posó en su cabeza y lo señaló, con lo que fue elegido por el clero y el pueblo. San Cipriano le da el título de hombre incomparable, y dice que la gloria de su muerte ha correspondido plenamente a la pureza de su vida.

   Sebastián, condenado por Diocleciano a ser atravesado con flechas, fue dejado por muerto en el lugar del suplicio. Recobrada la salud, se presentó al emperador y le reprochó abiertamente su impiedad. El tirano, exasperado por tanta audacia, lo condenó a ser apaleado hasta hacerlo expirar bajo los golpes. Una piadosa mujer, de nombre Lucina, recogió sus venerables restos y los colocó en las catacumbas, en el lugar donde hoy se levanta la basílica que lleva su nombre. 

domingo, 19 de enero de 2025

SAN CANUTO, Rey y Mártir

19 de enero
SAN CANUTO,*
Rey y Mártir

Todo hijo de Dios vence al mundo; y lo que nos hace
alcanzar victoria sobre el mundo es nuestra fe.
(1 Juan, 5, 4).

   Apenas ascendido al trono de Dinamarca, obtuvo este rey insignes victorias sobre sus enemigos; no se dejó, empero, deslumbrar por la gloria militar, veíaselo, en medio de sus triunfos, poner humildemente su corona a los pies de Jesús crucificado, y ofrendar a este Rey de reyes su persona y su reino. Como supiese que atentaban contra su vida, fue a la Iglesia de San Albano y, con la mayor calma, se confesó y comulgó. Estaba orando por sus enemigos, cuando un venablo, que le arrojaron por una ventana, lo echó por tierra al pie del altar. Sucedió esto en el año 1086. 

sábado, 18 de enero de 2025

DOMINGO II DEL TIEMPO ORDINARIO

PRIMERA LECTURA
La alegría que encuentra el esposo con su esposa, la encontrara tu Dios contigo

Lectura del libro de Isaías 62, 1-5

Por amor de Sión no callaré, por amor de Jerusalén no descansaré, hasta que rompa la aurora de su justicia, y su salvación llamee como antorcha.
Los pueblos verán tu justicia, y los reyes tu gloria; te pondrán un nombre nuevo, pronunciado por la boca del Señor.
Serás corona fúlgida en la mano del Señor y diadema real en la palma de tu Dios.
Ya no te llamarán «Abandonada», ni a tu tierra «Devastada»;
a ti te llamarán «Mi favorita», y a tu tierra «Desposada», porque el Señor te prefiere a ti, y tu tierra tendrá marido.
Como un joven se casa con su novia, así te desposa el que te construyó; la alegría que encuentra el marido con su esposa, la encontrará tu Dios contigo.
Palabra de Dios.

Salmo responsorial Sal 95, 1-2a. 2b-3. 7-8a. 9-10a y c (R.: 3)
R. Contad las maravillas del Señor a todas las naciones.

Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra; cantad al Señor, bendecid su nombre. R.

Proclamad día tras día su victoria, contad a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones. R.

Familias de los pueblos, aclamad al Señor, adamad la gloria y el poder del Señor, aclamad la gloria del nombre del Señor. R.

Postraos ante el Señor en el atrio sagrado, tiemble en su presencia la tierra toda. Decid a los pueblos: «El Señor es rey, él gobierna a los pueblos rectamente.» R.


SEGUNDA LECTURA
El mismo y único Espíritu reparte a cada uno como a él le parece

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 12, 4-11

Hermanos:
Hay diversidad de dones, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad de funciones, pero un mismo Dios que obra todo en todos.
En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común.
Y así uno recibe del Espíritu el hablar con sabiduría; otro, el hablar con inteligencia, según el mismo Espíritu.
Hay quien, por el mismo Espíritu, recibe el don de la fe; y otro, por el mismo Espíritu, don de curar. A éste le han concedido hacer milagros; a aquél, profetizar. A otro, distinguir los buenos y malos espíritus. A uno, la diversidad de lenguas; a otro, el don de interpretarlas.
El mismo y único Espíritu obra todo esto, repartiendo a cada uno en particular como a él le parece.
Palabra de Dios.

Aleluya Cf. 2 Ts 2, 14
Dios nos llamó por medio del Evangelio, para que sea nuestra gloria la de nuestro Señor Jesucristo.
 
EVANGELIO
En Caná de Galilea Jesús comenzó sus signos

 +Lectura del santo evangelio según san Juan 2, 1-11

En aquel tiempo, había una boda en Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí. Jesús y sus discípulos estaban también invitados a la boda.
Faltó el vino, y la madre de Jesús le dijo:
—«No les queda vino.»
Jesús le contestó:
—«Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora.»
Su madre dijo a los sirvientes:
—«Haced lo que él diga.»
Había allí colocadas seis tinajas de piedra, para las purificaciones de los judíos, de unos cien litros cada una.
Jesús les dijo:
—«Llenad las tinajas de agua.»
Y las llenaron hasta arriba.
Entonces les mandó:
—«Sacad ahora y llevádselo al mayordomo.»
Ellos se lo llevaron.
El mayordomo probó el agua convertida en vino sin saber de dónde venía (los sirvientes sí lo sabían, pues habían sacado el agua), y entonces llamó al novio y le dijo:
—«Todo el mundo pone primero el vino bueno y cuando ya están bebidos, el peor; tú, en cambio, has guardado el vino bueno hasta ahora.»
Así, en Caná de Galilea Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria, y creció la fe de sus discípulos en él.
Palabra del Señor